El presente estudio aborda el tema del vínculo afectivo en el apego precoz, este consiste en el contacto piel con piel entre la madre y su hijo inmediatamente después del nacimiento, si ambos se encuentran estables por el tiempo que deseen o por lo menos hasta que el recién nacido efectúe la primera toma del pecho de su progenitora. Objetivo: Determinar la relación entre el vínculo afectivo con las características sociodemográficas de las madres de neonatos atendidos en un hospital público del Ecuador. Metodología: Enfoque cuantitativo, alcance correlacional y diseño observacional. La población estuvo constituida por madres y sus neonatos que asistieron a los controles al centro obstétrico de un hospital público del Ecuador durante el mes de septiembre de 2022, a quienes se les aplicó la escala “Vínculo entre padres e hijos neonatos” versión española. Resultados: se determinó una edad promedio de las participantes entre 26 y 30 años, correspondiente al 33,33% de la muestra, en relación con el estado civil, se observó una mayor prevalencia de pacientes en unión libre con el 45,45%, se observó que un 33,33% poseen un grado de estudios secundario. De manera general se identificó un vínculo afectivo bajo. Además, se encontró un p valor < 0,05 entre la edad y estado civil con el nivel de vínculo afectivo. Conclusión: Las mujeres casadas de mayor edad practican un vínculo afectivo más intenso. Existe muchos beneficios con la práctica del apego precoz, como: calmar el llanto del neonato, estabilizar el aparato cardiorrespiratorio, desarrollar sensaciones táctiles, entre otros.
